El hijo pródigo
-
1
-
Soy aquel hijo pródigo que vengo ante tus plantas a confesar mis faltas,
-
a implorar tu perdón; yo soy aquel perdido que ha sido la deshonra, pero que desde ahora rindo mi corazón.
-
2
-
Retorno del camino, cansado y harapiento, hoy lloro y me arrepiento, pues mucho te ofendí; hoy triste y abatido,
-
y lleno de vergüenza, estoy en tu presencia, ten compasión de mí.
-
3
-
Permite que tu clemencia, que more aquí contigo, que siempre agradecido, te sirva en gratitud;
-
y pon en mi conciencia la augusta fe de un niño, sea humilde y tan sencillo, como lo fuiste tú.
-
4
-
Recuerdo que fui niño, formado por tu ciencia, me diste la inocencia, que yo la profané;
-
y ahora aquí rendido, imploro por tu nombre; ten compasión del hombre, que se halla ante tus pies.
-
5
-
Tú sales a mi encuentro, me abrazas compasivo, adviertes que he sufrido, la causa de mi error,
-
y ordenas al momento en vez de mi castigo, que se me de un vestido de gracia por tu amor.
-
6
-
Y dices que haya fiesta, calzadle y dadle abrigo; este hijo era el perdido,
-
y ha vuelto aquí al hogar; yo me uniré a la orquesta, entonaré los himnos,
-
por siempre y por los siglos, pues no saldré jamás.